La historia de los servicios de taxi en Praga

Los servicios de taxi en Praga están sujetos a una ley nacional sobre el transporte por carretera. En los medios y guías de turismo, algunos taxistas se han vuelto infames por no cumplir con los precios máximos establecidos y por las infracciones a la ley, y este ha sido uno de los temas visibles de la política comunitaria durante muchos años. Praga ha presentado enmiendas a las leyes para ayudar a resolver la situación.

Actualmente, el servicio de taxis en Praga es ofrecido únicamente por entidades privadas.

Desde el 1° de enero de 1962, el servicio monopólico de taxi municipal fue incorporado en las Empresas de Transporte de Praga en Praga, a la par con el servicio de alquiler de carros. El 1° de enero de 1989, la Compañía Estatal Taxi Praha fue establecida por el acta constitutiva del Comité Nacional de la Ciudad de Praga, con su domicilio fiscal en la calle Trojická, pero después de un cambio de circunstancias, la empresa pronto fue liquidada, el 1° de junio de 1991, por la decisión del Consejo de Administración Praga N° 6/11 del 30 de mayo de 1991. Luego, este sector se liberalizó y se dejó por completo al sector privado. El Vicealcalde Petr Hulinský y Petra Buzková (en ese momento candidata a la alcaldía de Praga) llegaron a principios de 2006 con la intención de establecer un nuevo servicio de taxis urbanos que competiría con los servicios privados, y la sugerencia también fue respaldada por el comisionado independiente Michael Hvízdal, ex miembro de la ODS, y de la Unión de la Libertad, pero no hubo una respuesta más amplia hacia ella.

Los servicios de taxis se encuentran entre los componentes del transporte público en la capital, Praga, que no reciben subsidios del erario público. Las condiciones básicas para la operación de un servicio de taxi, se establecen en la Ley de Transporte por Carretera. La ciudad de Praga determina los precios máximos, lo que permite que los servicios de taxi se incluyan entre los servicios con precios regulados, de acuerdo con la resolución del Ministerio de Hacienda, publicada bajo la Ley de fijación de precios. Sin embargo, el derecho a regular los servicios de taxi en Praga fue impugnado con éxito, al menos una vez, en la corte.

La situación en los servicios de taxi en Praga ha sido un tema constante y controvertido de la política municipal de Praga desde los años 90. Tanto los medios, como los turistas extranjeros hacen notar la sobrevaluación sistemática de las tarifas, el incumplimiento de las condiciones legales y varios fraudes.

La mayoría de las estaciones de taxi (aquellas ubicadas en carreteras locales) son operadas por la Administración de Comunicaciones Técnicas. En 2002, se organizó una “lotería”, destinada a elegir candidatos para la gestión y el uso exclusivo de las estaciones de taxi más lucrativas, con el operador de la estación de taxis siendo responsabilizado por los delitos cometidos por sus conductores. La ciudad emitió un decreto sobre las reglas de operación de las estaciones de taxi, que estipula ciertas condiciones adicionales (equipo, clase y color del vehículo) como condición para el uso de las estaciones de taxi. Los conductores que cumplen con estos requisitos reciben otros beneficios de la ciudad (como el uso de carriles exclusivos). Hasta 2006, la ciudad operó dentro de los límites de la ley, al otorgar varios anexos no públicos, al contrato entre la ciudad y los operadores de las estaciones de taxi, como las reglas de operación para las estaciones de taxi, y ajustando los problemas, que de hecho, exceden el tráfico regulación en las estaciones de taxi por decreto de las reglas de operación.

Entre otros, las autoridades de la ciudad fueron acusadas de procedimientos incorrectos, y con frecuencia ilegales por parte de Cech Taxi Prague, cuyas actividades también cubrieron a los taxistas independientes que conducen sus propios automóviles, y también por Jiří Kvasnička, propietario de AAA Radiotaxi Ltd, que según se informa es el centro de despacho (organizador) más importante de taxis en Praga.

Otro problema, son algunos servicios que se anuncian como taxis en la publicidad, pero que están registrados legalmente como servicios para pasajeros ocasionales, que no están sujetos a las restricciones de licencia y precio que se aplican a los servicios de taxi. En tal caso, las órdenes y pagos deben, de acuerdo con la ley, llevarse a cabo fuera del automóvil. Sin embargo, los servicios de taxi competidores sospechan que, en muchos casos esta diferencia respecto a los taxis no se cumple, y es solo una evasión de las condiciones para operar un servicio de taxi.

En febrero de 2009, el carril reservado en V Holešovičkách fue el primero en Praga en ser probado para los taxis. Posteriormente, también apareció uno en una parte de la calle Strakonická. Desde mayo de 2009, el uso se ha ampliado a los autobuses urbanos, las bicicletas y los taxis en las calles Českobrodská, Duškova, Horňátecká, Vrchlického, Vysočanská y Zálesí, en las calles Kuklova y Ke Krči, el uso se ha ampliado solo para servicios de taxi. Se suponía que el marcaje horizontal de estos carriles se modificaría durante el verano de 2009. El decreto urbano limita el uso de carriles exclusivos para taxis solo a aquellos operadores cuyos vehículos cumplan con los requisitos del decreto urbano.

Tuvo lugar una disputa específica en torno al sitio de la Plaza del Barrio Antiguo, en la que resultó ganador SEDOP.

Esta estación de taxis ha sido usada por los conductores que anunciaban una tarifa varias veces superior a la que permite la reglamentación de precios máximos en la ciudad, en su mayoría 99 CZK por km (en comparación con el precio máximo en la ciudad de 28 CZK por km), y sus abogados, Klára Slámová y Ilja Kubíček argumentaban que dicha reglamentación de precios no correspondía a los costos elegibles y, por lo tanto, no estaba justificada, al igual que no tenían derecho a obligar el uso de la estación de taxis en la vía pública ni de determinar el color de los carros que pueden usarla. La ciudad le dio a SEDOP un aviso de inquilinato tres veces (por primera vez en 2005), pero la compañía ha impugnado de forma reiterada la validez de la misma. Desde el verano de 2006, los agentes de policía de la ciudad han estado distribuyendo folletos con el siguiente texto a los clientes potenciales: “Los precios marcados en la lista de precios de este vehículo son inconsistentes con el reglamento de precios de la ciudad de Praga y su contabilidad también infringe este reglamento de precios”. En abril de 2007, el Tribunal del Distrito 1 de Praga, impuso una multa de CZK 100.000 al Ayuntamiento de Praga por no cumplir con la resolución preliminar del tribunal y, por el contrario, impedir que los conductores del inquilino usaran el sitio. En julio de 2009, el Tribunal Municipal decidió sobre la validez del segundo aviso y el municipio cerró la estación de taxis en la Plaza del Barrio Antiguo,  convirtiéndolo en un estacionamiento para discapacitados. Sin embargo, un representante de Taxi Prague, un sindicato, alegó que aún no había habido una disputa sobre la validez de la tercera declaración, que emitió una ordenanza preliminar que prohibía al municipio evitar que los taxistas usen el sitio. Aún se están llevando a cabo las disputas judiciales y administrativas sobre algunas de las multas impuestas por el municipio a los conductores.

Entre 2002 y el 31 de agosto de 2009, el municipio impuso 1468 multas a los proveedores de servicios de taxi, para un acumulado de 141,8 millones de CZK. Cerca de 100 taxistas, de un total de alrededor de 5500 fueron acusados de delitos. Menos de la mitad del importe total de las multas impuestas fue aplicado por ejecuciones, y alrededor de un tercio (46,4 millones de CZK), no se habían pagado en octubre de 2009. Según el canal de televisión ČT24, la mayoría de las veces, los precios máximos estipulados en el reglamento de la ciudad y los “arrendamientos de concesiones” fueron rebasados, y por lo tanto, castigados.

La ciudad de Praga ha iniciado repetidamente cambios en la Ley de Transporte por Carretera, y otras leyes que deberían conducir a la solución de los problemas de los servicios de taxi. En 2005, la ciudad de Praga propuso una enmienda, que finalmente fue adoptada en la redacción de una Enmienda compleja hecha por el Miembro de la Cámara de Representantes, el Sr. Hovorka. Esta enmienda abolió la restricción territorial de la validez de las licencias para conducir de taxis, introdujo posibilidades para la suspensión y eliminación de la licencia, y redefinió la fiabilidad del taxista. La siguiente enmienda a la Ley de fijación de precios, aumentó significativamente el límite superior de las posibles multas. Desde el 1° de junio de 2008, la ciudad de Praga ha presentado la propuesta de enmienda a la Ley de fijación de precios, que tiene la intención de evitar que los taxistas obstaculicen la aceptación de documentos de los procedimientos administrativos, ampliando el período de prescripción. El 22 de octubre de 2009, la Fiscalía de Praga aprobó una propuesta para una importante enmienda a la Ley de Transporte por Carretera, que la ciudad presentará al Parlamento de la República Checa en noviembre. Esta modificación cambiará fundamentalmente la forma de registrar a los conductores y taxistas, y ajustará las condiciones para la autorización de taxis, cambiará la definición de los servicios de taxi, establecerá restricciones y obligaciones adicionales para la prestación de transporte ocasional de pasajeros, introducirá nuevas sanciones, por ejemplo, la confiscación el vehículo para provecho del municipio, sin importar quién sea su propietario, etc.

Para el 31 de diciembre de 1999, se registraron 2.934 operaciones con licencia en la República Checa con el giro de “taxis” y 6 con el giro de “transporte de vehículos motorizados, no regular”. A partir del 1° de abril de 2004, se registraron 2845 licencias para taxis y 495 para el llamado “contrato de transporte”. Para el 31 de diciembre de 2005, se registraron 5288 autorizaciones fiscales y 2252 para el “transporte por contrato”. Solo hay 3436 auditorías fiscales activas, de las cuales 3145 son para personas físicas y 48 para razones sociales. A partir del 28 de febrero de 2006, se registraron 14 operadores con más de 25 empleados y 3650 operadores con al menos 25 empleados.

Para el 8 de junio de 2006, se registraron 5561 taxis en Praga. Según el estudio no especificado del Ministerio del Transporte de Quebec, hay una tasa óptima de 2.1 vehículos por cada 1000 habitantes. En Praga, con esta tasa, debería de haber cerca de 2440 taxis.

En 2009, según el Vicealcalde Rudolf Blažek, 4781 taxis y 3700 conductores de taxi estaban registrados en Praga.

Desde 2010, el número de automóviles registrados ha aumentado con regularidad. En 2013, el municipio afirmó que había más de siete mil conductores en la metrópoli. En ese momento, el Ayuntamiento de Praga declaró que había al menos el doble de taxistas que los necesarios. Según el Concilio Municipal, esta oferta, que rebasa por el doble a la demanda, conduce a prácticas deshonestas, y es la razón por la cual los taxistas injustos están sobrevaluando sus servicios.

En 2014, Uber ingresó al mercado como intermediario para asegurar el llamado transporte contractual, no un servicio de taxi. Según las autoridades de la empresa Uber, sus automóviles están obligados a viajar con una designación de taxi visible y un taxímetro oficialmente aprobado, al igual que los demás taxis. Al igual que Uber, otras empresas que operan aplicaciones móviles como Liftago, Taxify y Hopin también llegaron al mercado.

En 2017 se declaró que hay 5000 taxis en Praga, pero el Ayuntamiento de Praga no tiene más detalles sobre el número de licencias. Para Uber, hay 2000 conductores, el competidor Liftago tiene 1100 conductores en Praga, y Taxify no declaró el número de sus conductores. El principal operador de traslados en Praga, Prague Airport Transfers, tiene más de 200 conductores. Sin embargo, el número de conductores no puede calcularse fácilmente, ya que algunos conductores trabajan para más operadores y aplicaciones como subcontratistas.